Alguna vez tuviste curiosidad de saber ¿cómo las máquinas expendedoras detectan tu dinero?
Y no, no es que estás máquinas tengan duendes pequeños que cuentan el dinero o algo así, todo funciona con la maravillosa tecnología. Una máquina expendedora tiene esta difícil tarea de identificar cuánto dinero introduces en menos de un segundo, además de identificar si es auténtica o no y devolver el cambio exacto. Por lo menos aquí en México estás máquinas deberían identificar que las cosas ya cayeron para no andar destruyéndolas, ¡yo sólo quería un Fuze Tea pero no había caído! ¡Suélteme oficial!... Bueno, la policía no me llevó, pero si pude sacar mi té helado. Pero en fin.
Cuando metes una moneda, un sensor láser detecta el tamaño de la moneda y un electroimán detecta el tipo de metal. A partir de estos datos, la máquina diferencia una moneda real de una falsa y clasificarlas por su valor. Una vez que la máquina contó tu dinero y que las monedas hayan sido clasificadas, la máquina puede devolver tu cambio con una precisión exacta.
Si tuviste la mala suerte (como yo) de que tu producto se atoro, existen máquinas que detectan los productos que hayan caído. Si esta no cayó, la máquina ordena a los motores que realicen otro giro y así volver a empujar el producto hasta que por fin caiga.
Si alguna vez tuviste curiosidad, esperemos estés satisfecho con este vídeo.
Y no, no es que estás máquinas tengan duendes pequeños que cuentan el dinero o algo así, todo funciona con la maravillosa tecnología. Una máquina expendedora tiene esta difícil tarea de identificar cuánto dinero introduces en menos de un segundo, además de identificar si es auténtica o no y devolver el cambio exacto. Por lo menos aquí en México estás máquinas deberían identificar que las cosas ya cayeron para no andar destruyéndolas, ¡yo sólo quería un Fuze Tea pero no había caído! ¡Suélteme oficial!... Bueno, la policía no me llevó, pero si pude sacar mi té helado. Pero en fin.
¿Cómo detectan las monedas?
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Cuando metes una moneda, un sensor láser detecta el tamaño de la moneda y un electroimán detecta el tipo de metal. A partir de estos datos, la máquina diferencia una moneda real de una falsa y clasificarlas por su valor. Una vez que la máquina contó tu dinero y que las monedas hayan sido clasificadas, la máquina puede devolver tu cambio con una precisión exacta.
Si tuviste la mala suerte (como yo) de que tu producto se atoro, existen máquinas que detectan los productos que hayan caído. Si esta no cayó, la máquina ordena a los motores que realicen otro giro y así volver a empujar el producto hasta que por fin caiga.
Si alguna vez tuviste curiosidad, esperemos estés satisfecho con este vídeo.